Mostrando entradas con la etiqueta Cenobio de Valerón. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Cenobio de Valerón. Mostrar todas las entradas

Cenobio de Valerón






El Cenobio, o Granero de Valerón, es un yacimiento arqueológico situado al norte de la isla de Gran Canaria, más exactamente en el municipio de Santa María de Guía y en el barranco que lleva su nombre. Constituye la mejor muestra de granero colectivo levantado y usado por los aborígenes de la isla antes de la conquista. Es uno de los parques arqueológicos más importantes de Canarias.


Historia


La palabra Cenobio significa lugar de reclusión de las Harimaguadas, o lo que es lo mismo, mujeres sacerdotisas encargadas de la educación de las adolescentes aborígenes que estaban destinadas y consagradas al culto (maguadas), o de las jóvenes de clase noble que permanecían enclaustradas bajo su custodia hasta el matrimonio. Dejando un poco de lado esta leyenda romántica ya descartada, y centrándonos en la funcionalidad de los graneros colectivos, el Cenobio de Valerón es una de las mejores muestras de “granero de acantilado” es decir, la forma más primitiva de agadir o almacén colectivo norteafricano que existen en el Archipiélago Canario. Son muchísimos los graneros que se distribuyen por la isla de Gran Canaria, sobre todo en su mitad este, que dejan constancia de la importancia de la agricultura para el pueblo aborigen, y que, gracias a su sistema de regadío, generaba un excedente que debía ser guardado y protegido para garantizar la supervivencia del pueblo.



Construcción


El Granero de Valerón está formado por un numerosísimo grupo de cuevas, sobrepasan las 300, colgadas literalmente sobre la pendiente de la denominada "Cuesta de Silva” y labradas en toba (piedra volcánica) a la vez que una serie de recovecos, caminos y peldaños de acceso a las mismas. Los compartimentos tienen entre 1 y 3 m² de aforo y están distribuidos en 8 pisos. Su construcción fue posible gracias al uso de utensilios por parte de los indígenas, tales como herramientas de piedra y madera que empleaban para excavar directamente en la roca blanda o porosa. Las cuevas o depósitos tienen variedad de tamaños y muchas de ellas están comunicadas entre sí. El perfil estratégico de esta localización, desapercibida desde el exterior y ubicada en una pared casi vertical, convierten al Cenobio de Valerón en una auténtica fortaleza natural.



Funcionamiento


La finalidad de estas cuevas era servir de almacén para los alimentos. Una vez guardados los granos y cereales, se cerraban con una puerta bien ajustada y se solían asegurar con una masa de barro que llevaba impreso un sello familiar de propiedad, con forma de pintadera. Existían personas dedicadas especialmente a la guarda y custodia de los alimentos, así como a la distribución de los granos entre los pobladores. En el yacimiento se han encontrado ídolos, pintaderas, cerámicas, huesos humanos y cenizas, que se creen que pudieron pertenecer a los que salvaguardaban los silos.